lunes, 17 de noviembre de 2008
Elvis Presley y Richard Nixon, 1970
Para La Foto de la Semana:
Elvis Presley y Richard Nixon, 1970
segun EFE EME | 17/11/2008
Elvis Presley, a lo largo de su no demasiado extensa vida, fue protagonista de algunos momentos gloriosos pero también de otros muchos verdaderamente lamentables. Entre estos últimos, uno de los más patéticos lo protagonizó el 21 de diciembre de 1970, cuando se presentó, sin cita previa, en la Casa Blanca para saludar al entonces presidente de los Estados Unidos Richard Nixon (un pájaro de cuidado). Éste lo recibió unas horas después, tras leer una carta Elvis dejó en la entrada del complejo presidencial, en la que reflejaba su preocupación por las drogas, los hippies, los Panteras Negras... En la reunión, en el Despacho Oval, Elvis le explicó que él podría luchar contra las drogas y las técnicas de los comunistas para lavar el cerebro a los jóvenes... Que podría "infiltrarse" en cualquier grupo hippie y ser aceptado. Cuentan las crónicas que Nixon no sabía muy bien qué decir o pensar: si estaba ante un lunático o, quizás, una aproximación a una figura como Elvis podría beneficiarle. La reunión terminó de forma surrealista, con Elvis revolviendo en un cajón para llevarse algunos pins de recuerdo.
De aquel encuentro quedó esta foto, disparada por Ollie Atkins, fotógrafo de la Casa Blanca, en la que parece que Elvis, con esa mirada, no era precisamente el más indicado para luchar contra la droga... Vestido con sus mejores galas –"soy el Rey", había dicho al llegar unas horas antes a la entrada. ¿Qué Rey?, le preguntaron; "El Rey del rock", respondió él–, se le ve seguro de sí mismo aunque un tanto ido, pero la expresión de Nixon, forzando una sonrisa tampoco tiene desperdicio. Elvis, perdido por completo, daba inicio así a la última década de su vida, la que le vería aumentar de peso preocupantemente y transformarse, definitivamente, en el juguete roto que todos recordamos.
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